La vida cambia continuamente aunque a veces no lo percibamos, cada instante el mismo lugar cambia, la luz, la temperatura, las personas hacen de un mismo sitio muchos diferentes, pasar por el una y otra vez pero en el momento adecuado, en el que nos haría feliz, es muchas veces fruto de la fortuna... ojalá tenga mas oportunidades para pasar de nuevo por ese momento.....idóneo que sea posible, volver a intentarlo.
El camino fluyó delante de nuestros pasos, fuimos borrando un ejercito de huellas con las nuestras, deseosas de ser borradas por las nuevas que pisaran el mismo destino, son las mismas....
La Camorca, quedaba aún lejos, y tenía la sensación de que no iba a tener tarde suficiente para su encuentro, no había prisa y eso es lo que más me hacia feliz.
El olor del pinar, del río, de siete picos al alcance de la mano, el olor del atardecer, buscar el último suspiro de luz entre los helechos, para no dejar esa imagen alejarse en el olvido, nos llevó al rastro de la noche, que nunca vivo.
Allí, el sudor del último esfuerzo y el apetito, nos sentó a todos dentro del refugio, fuimos los justos.... y el calor, el poco espacio y la razón de porque estábamos allí, nos sacó de el.
Tras la cena sonrojada por el buen vino, fue el mejor momento de disfrutar del mar de estrellas que nos cobija a diario, y que hemos borrado de nuestra vida diaria, recorrimos el cielo a golpe de puntero para saber sus nombres, y tras las presentaciones de rigor, creo que entre mis compañeros y él, ahora habrá menos espacio, aunque viva a millones de años luz.
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| SEGOVIA |
A lo lejos el hombre........
a mi la lado, un mismo sueño. Vivac.
Al amanecer lo mejor....... la mejor butaca, sin estar numeradas el escenario era imponente, Peñalara, Bola del mundo, El Reventón...... Todo un espectáculo: QUE SE LEVANTE EL TELÓN ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
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